Táblet Convertible 12": Microsoft Surface Pro 3

FICHA TÉCNICA 
Procesador: Intel Core i3-4300U (1,9 Ghz / TDP 15 W. / 3 Mb. Cache L3) 
Memoria: 4 Gb. LPDDR3 a 1600 Mhz.
Disco Duro: 128 Gb. SSD mSata
Sistema Operativo: Windows 10 Pro (64 bits) 
Red: Wifi-AC y Bluetooth. 
Tarjeta Gráfica: Intel HD Graphics 4400 (Integrada)
Pantalla: 12" WQHD (2160x1440) con tecnología IPS. 
Dimensiones: 292x201x9 mm. 
Peso: 0,81 Kg. 
Otros: Puerto USB 3.0, salida miniDisplayPort, puerto docking-station, módulo TPM, lector de tarjetas microSD y dos cámaras (ambas de 5 Mpx.).

Precio (Actualizado 31/10/2016)

YA NO ESTÁ DISPONIBLE

Más Información 

- Página Oficial

- Reseña en Notebookcheck.net (en inglés)

Disponible en configuraciones basadas en microprocesadores Core i5 e i7 de bajo consumo, y equipadas con unidades SSD de hasta 512 Gb. y pantallas de 12" con resolución WQHD (superior a Full-HD), la Microsoft Surface Pro 3 fue, en el momento de su salida al mercado, la tablet Windows más potente hasta el momento, razón por la cual Microsoft la definió como "La tableta que puede reemplazar tu portátil".

Aunque en principio no tenía intención de comentar este modelo, una discusión con un amigo acerca de las ventajas y desventajas del mismo, y de la conveniencia de llamarlo portátil convertible o táblet con teclado, motivó que, tras documentarme extensivamente en varias de las múltiples reseñas acerca de esta, decidiese hacer una reseña sobre la misma.

Dado que Microsoft la identifica como táblet, y que de hecho su teclado se vende por separado, he decidido llamarla "táblet convertible", aunque no tengo del todo claro en que se convierte pues, aunque tremendamente ligero, la unidad teclado ofrecida por Microsoft no se parece demasiado al teclado que podemos encontrar en un portátil tradicional, siendo más parecido a una funda con teclado que otra cosa.

De hecho, este teclado no lleva una bisagra fija como la mayoría de portátiles convertibles, sino que la táblet se mantiene erguida mediante un pie de soporte existente en la propia táblet, que podemos regular si queremos cambiar la inclinación de esta.

Mientras que tanto el marco de la misma (de color negro) como la propia pantalla presentan un acabado brillante, la cubierta de la misma es de color gris metalizado y cuenta con bordes angulosos, presentando salidas de ventilación en todo el perímetro de estos, lo cual no hace que el agarre de la táblet sea incomodo en ningún momento.

Construido en una aleación de magnesio, no se aprecia fragilidad ante la presión en ningún área de la cubierta, que no cede prácticamente nada si siquiera cuando presionamos con bastante fuerza sobre el centro de la cubierta.

Una de las características más interesantes de este modelo, en mi opinión, es el mencionado pie de soporte, que es una ancha solapa que cubre todo el largo del dispositivo, y la mitad del ancho del mismo, permitiendo un amplio ángulo de apertura efectivo que permite colocar la pantalla en múltiples posiciones de inclinación, y que permite una posición firme en cualquier situación.

Animada por un microprocesador de bajo consumo Intel Core i5-4300U a 1,9 Ghz., aproximadamente un 10% inferior en rendimiento al Core i5-5200U de quinta generación, permite realizar tanto tareas cotidianas (ofimática, Internet, multimedia, etc.) como avanzadas (retoque fotográfico, edición de vídeo, diseño CAD, etc.) a un nivel básico.

Equivalente al mencionado Core i5-5200U, la mayor potencia proporcionada por el microprocesador de bajo consumo Intel Core i7-4650U a 1,7 Ghz. (hasta 3,3 Ghz. con TurboBoost) equipado por la versión tope de gama, permite un comportamiento mejorado en funciones avanzadas, que podrán ser realizadas a un nivel doméstico o aficionado.

Compatible con las tecnologías de virtualización VT-x y VT-d, las nuevas instrucciones AES-NI y AVX2, la segunda versión de TurboBoost permite a su microprocesador aumentar su velocidad dinámicamente hasta 2,9 Ghz. cuando solo unos de los núcleos está activo (hasta 2,6 Ghz. cuando ambos lo están).

La versión comentada dispone de 4 Gb. de memoria LPDDR3, y una unidad SSD de 128 Gb. con interfaz mSata.

Mientras la memoria va soldada en la placa y no puede ser actualizada, tanto la unidad SSD mSata como la batería si podrían ser sustituidas, aunque debemos tener en cuenta que el proceso de desmontaje de esta táblet es tremendamente complicado (te puedes cargar la pantalla fácilmente), por lo que no es recomendable hacerlo salvo en caso de extrema necesidad.

Además de excelentes capacidades de reproducción multimedia, la Intel HD Graphics 4400 integrada en el Core i5-4300U permite una experiencia de juego aceptable (detalles bajos) con un puñado de títulos actuales muy poco exigentes como Sims 4, FIFA 15 o F1 2014 (2014).

Aunque ligeramente más potente, la Intel HD Graphics 5000 de la versión Core i7 ofrecerá un comportamiento similar en juegos (con unos framerates ligeramente más altos) y multimedia a la mencionada HD Graphics 4400.

Su pantalla, un panel LCD de 12" con resolución WQHD (2160x144), retroiluminación LED y acabado brillante, proporciona altos valores de brillo y contraste y, gracias a la tecnología IPS, unos muy amplios ángulos de visión.

Respecto a la funcionalidad táctil de la pantalla, ofrece una excelente respuesta sin esperas ni retardos, soportando gestos multi-táctiles, y hasta 10 contactos simultáneos.

Aparte del cargador de corriente (con un peso de apenas 200 gramos), el único accesorio incluido con esta Surface Pro es el llamado Surface Pen, un lápiz óptico basado en tecnología N-Trig que parece perder ciertas funcionalidades si lo comparamos con el equipado por la Surface 2, ofreciendo 256 niveles de presión en lugar de los 1024 alcanzados por el modelo antiguo, basado en tecnología Wacom (la marca más conocida en tabletas digitalizadores).



No parece, en cualquier caso, que la experiencia de dibujo en la Surface Pro 3 haya mermado especialmente por estos cambios, y no es difícil encontrar alabanzas a esta por parte de artistas gráficos (aunque sin dejar de comentar que sería mejor si fuese compatible con Wacom).

De marca Maxwell, la tarjeta Wifi proporciona compatibilidad con Wifi-AC (el último estándar) y Bluetooth 4.0, no contando este modelo con conectividad Gigabit Ethernet o con Intel Wireless Display (aunque si con Miracast).

En lo que se refiere a conexiones externas el Surface Pro 3 me ha decepcionado bastante, contando únicamente con un puerto USB 3.0, salida miniDisplayPort, puerto docking-station, módulo TPM y un lector de tarjetas microSD..

Cuenta además con dos cámaras, frontal y trasera, ambas con 5 Mpx. de resolución, que no parecen ofrecer una gran calidad de imagen.

Como comentaba al principio, el accesorio teclado se vende por separado, estando disponible en colores azul y negro, con un precio cercano a los 150 euros.

Retroiluminado en blanco, el teclado presenta un tamaño un 10% inferior al de un teclado estándar y, aunque cuenta con teclas de buen tamaño, la nula separación entre ellas motiva que en ocasiones se pulsen dos teclas al mismo tiempo (sobre todo al principio), contando además con un corto recorrido al pulsar que motiva que la experiencia de escritura sea algo inferior a lo que seria deseable.

Es conveniente comentar la posibilidad de inclinar ligeramente el teclado, proporcionando una escritura mas cómoda al estar cada una de las hileras de teclas a una altura ligeramente diferente aunque, según comentan en diversas reseñas, este cambio motiva que el teclado, ya de por si un poco ruidoso, produzca un molesto "clac" cada vez que pulsamos una tecla.

Aunque un poco pequeño, el clickpad situado bajo el teclado proporciona una buena respuesta y un adecuado deslizamiento de los dedos, siendo compatible con los gestos multi-táctiles más comunes.

Si lo deseamos, podemos también adquirir este modelo junto con su "funda" teclado en un pack que incluiría además una suscripción a Office 365+ (no se indica la duración).

Los pequeños altavoces situados en el frontal de la táblet proporcionan una buena calidad de sonido, y un razonable nivel de volumen, si bien los graves son prácticamente inexistentes.

Activo en todo momento, el ruido generado por pequeño ventilador presente en el interior de la Surface Pro 3 es prácticamente inexistente durante un uso ligero y medio, siendo necesario someter al portátil a alta carga para que el ruido generado sea claramente audible, aunque no llegará a resultar molesto en ningún momento (a menos que seamos muy sensibles al ruido).

Relativamente fresco durante un uso ligero, bajo carga la cubierta de magnesio puede llegar a alcanzar temperaturas elevadas que hagan incomodo el uso como táblet, una circunstancia especialmente patente en las versiones equipadas con microprocesadores Core i7, una incidencia sobre la que podemos encontrar múltiples comentarios en diversos foros y blogs.

Uno de los principales puntos fuertes de este modelo reside en la larga autonomía proporcionada por su batería, que supera las 8 horas de uso ligero (navegación con Wifi).

Se entrega con Windows 10 Pro (64 bits) instalado y su correspondiente licencia.