Análisis portátil para juegos MSI GX70-3BE

FICHA TÉCNICA
Procesador: AMD A-Series A10-5750M ( 2,5 Ghz / TDP: 35W / 4 Mb. Cache)  
Memoria: 8 Gb. DDR3 a 1600 Mhz. (Ampliable a 32 Gb.?).
Disco duro: 500 Gb. a 7200 rpm. 
Sistema operativo: Windows 8 (64 bits)
Red: Gigabit Ethernet, Wifi-N, y Bluetooth.
Tarjeta Gráfica: AMD Radeon HD 8970M (2 Gb GDDR5)
Pantalla: 17,3" Full-HD (1920x1080) con tecnología LED.
Dimensiones: 428x288x55 mm.
Peso: 3,71 Kg.
Otros: 5 puertos USB (3 de los cuales son USB 3.0), salida VGA, salida HDMI, salida miniDisplayPort, lector de tarjetas SD/MMC, teclado retroiluminado, altavoces 2.1, touchpad multi-táctil y webcam. 

Más Información:
- Página Oficial

Durante las últimas semanas, y por cortesía de MSI España, he tenido oportunidad de probar "in situ" las bondades del MSI GX70-3BE (razón por la cual he estado poco activo en el blog ultimamente), un portátil para juegos de 17" basado en el mismo chasis que el GT70 (el tope de gama de MSI), y basado en uno de los microprocesadores AMD más potentes, (un A10-5750M de cuádruple núcleo) y una gráfica Radeon HD 8970M que es, en el momento de publicación de esta entrada, el chip gráfico para portátil más potente ofrecido por AMD.

Lo primero que me llama la atención, antes de abrir la caja en la que viene el portátil, es el elevado peso de esta, el cual supera ligeramente los 5 Kg., una cifra que, aunque muy elevada para un modelo doméstico común, no lo es tanto en modelos que, como este, están orientados a los juegos.

Descubro también que la unidad que me han enviado ya ha utilizada con anterioridad, y que alguno de los anteriores reviewers no ha sido demasiado cuidadoso con la faja que cubre el portátil (muestra imágenes del Crysis 3), pues presenta roturas en una esquina.

Cabe destacar la cuidada presentación del embalaje del portátil, que va correctamente protegido dentro de una caja negra estampada con el dragón rojo que aparece en el emblema de la Gaming G Series de MSI a la que pertenece este modelo, y la leyenda "Top Choice - Top Player".

Al abrir la caja descubrimos que la presentación interior es aun mejor que la exterior, pues el portátil se encuentra dentro de una bolsa de tejido negro parecido a tela (con el escudo de Gaming G Series en blanco), perfectamente inmovilizado por sendos moldes de cartón negro (y no de corcho blanco como en la mayoría de portátiles), y una caja también negra que contiene la batería y el alimentador.

Al sacar el portátil de la bolsa compruebo que, aunque el peso es bastante elevado (algo más de 3,7 Kg. con batería), la solidez del portátil también lo es, presentando una gran firmeza en la cubierta y el área de trabajo que se traducen en una elevada resistencia a la presión, no apreciándose ningún artefacto en la pantalla aun presionando con bastante fuerza.

Comparado con los agresivos diseños de los Alienware 17 de Dell o los ROG G750 de Asus, el diseño del GX70 es bastante discreto, presentando superficies en color negro tanto en la cubierta como en el área de trabajo, que tanto en el centro de la cubierta como en el reposamuñecas presentan un acabado en aluminio cepillado, Siendo la cama del teclado y la botonera situada sobre el teclado las únicas aéreas de superficie brillante, mientras que los altavoces se encuentran ocultos por sendas rejillas metálicas a los lados de la mencionada botonera.



Como comentaba al principio de la entrada, monta un microprocesador de cuádruple núcleo AMD A-Series A10-5750M cuya velocidad nominal es de 2,5 Ghz., pudiendo aumentar su velocidad de reloj hasta 3,5 Ghz. con la tecnología TurboCore (similar al TurboBoost de Intel).

Para medir la velocidad del microprocesador, y realizar una comparativa con respecto a otros, he utilizado la conocida aplicación de benchmarking CineBench en su versión R11.5, pues fue esta última la utilizada en reseñas anteriores, y por ello puede ser utilizada para comparar el rendimiento del microprocesador AMD con microprocesadores i7 de tercera y cuarta generación.

El resultado alcanzado por el microprocesador AMD en este benchmark sintético (2.29) es muy inferior al de los microprocesadores i7 de tercera y 4ª generación (4.51 y 6.28), estando por debajo incluso del resultado alcanzado por un Intel Core i5-2450M se segunda generación, que alcanza 2.59 puntos en este mismo test.


Para futuras referencias he realizado también un test con la última versión de Cinebench (R15), en la cual el A10-5750M alcanza una puntuación de 202, situándose ligeramente por debajo del microprocesador de bajo consumo Intel Core i5-3317U (a 1,7 Ghz.) incluido como referencia en el propio benchmark.

El rendimiento del microprocesador estará, por tanto, a medio camino entre un Intel Core i3 y un Core i5 (más cerca del primero que del último), siendo posible realizar tareas cotidianas con holgura (ofimática, Internet, multimedia), y avanzadas (retoque fotográfico, edición de video, etc.) a niveles domésticos.

Para comprobar el rendimiento del equipo en una de estas "tareas avanzadas", procedí a comprimir un video MP4 de 1 hora y 40 minutos con resolución HD (720p) con la aplicación Handbrake, que con la configuración por defecto genero un archivo MP4 (si, el mismo formato que el original) de 1,30 Gbs. en 38 minutos y 14 segundos.



El modelo analizado cuenta con 8 Gb. de memoria DDR3L a 1600 Mhz. (doble canal), disco duro de 750 Gb. a 5400 rpm. y una regrabadora de DVD multiformato con soporte para discos de doble capa.
Afortunadamente, el sello de garantía de la unidad de muestra estaba ya roto, por lo que no tuve ningún reparo en abrir la gran tapa de mantenimiento presente en la base, la cual dejo al descubierto los diferentes componentes del equipo.


Como podemos ver en la fotografía adjunta, los dos zócalos de memoria presentes en la base están ocupados con sendos módulos de 4 Gb., por lo que cualquier actualización pasaría, necesariamente, por la sustitución de los dos módulos de memoria por otros de mayor capacidad (con dos módulos de 8 Gb. ampliaríamos la capacidad de la memoria hasta 16 Gb.).

Me genera ciertas dudas que, pese a contar solo con dos zócalos para memoria,  en la ficha técnica de MSI indiquen que este modelo permite hasta 32 Gb. de RAM, pues que yo sepa de momento no hay módulos de más de 8 Gb. de capacidad.


No dispone tampoco de ningún zócalo mSata (el GT70 lleva 3), pero si un segundo zócalo SATA3 en el que podríamos colocar una SSD de 2,5", lo que sin duda mejoría el comportamiento del sistema.

La gran potencia 3D de su gráfica AMD Radeon HD 8970M (2 Gb. de memoria GDDR5 dedicada) compensa, en parte, el escaso rendimiento proporcionado por el microprocesador, y permite a este modelo un buen comportamiento con juegos actuales, si bien no todos ellos pueden ser jugador con detalles altos.

Como comentaba al principio de la entrada, la unidad de prueba llego a mi después de haber sido analizada por otro medio de comunicación, que habían instalado los últimos drivers genéricos que AMD había puesto a disposición de los usuarios. Esta práctica, muy recomendable en ordenadores de sobremesa, no lo es tanto en ordenadores portátiles, en los que generalmente no solo no mejora el rendimiento, sino que puede provocar un malfuncionamiento del centro de control de los drivers (AMD Catalyst) como pasaba en este caso, no apareciendo el menú de gráfica híbrida del citado software.

Una vez restaurado el sistema a valores originales de fábrica, pude notar una sensible mejora en el rendimiento del portátil con juegos, que se tradujo en la posibilidad de configurar mayores niveles de detalle en los diferentes juegos.



Para comprobar su comportamiento con juegos, procedí a instalar diversos títulos en el portátil (todos ellos prestados por amigos y familiares), siendo el más reciente de ellos el Assasin's Creed: Liberation HD, uno de los primeros juegos presentados este año 2014, y que usa el mismo motor de juego con el Assasin's Creed 3, y que solo en detalles bajos (o normales como los denomina el propio juego) permite una fluidez jugable con el GX70, siendo obtenerla tanto en resolución 720p como en 1080p.

En el caso del Assasin's Creed IV: Black Flag del pasado año 2013, un relato de piratas ambientado en el Mar Caribe, solo en resolución HD-Ready (1280x720) y detalles bajos es posible obtener una fluidez adecuada para que sea posible jugar.

Mejor resultado ofreció el Assasin's Creed III, un juego de finales del año 2012 que es fluido en resolución Full-HD y detalles medios (que son los más bajos que el juego permite), mientras que en resolución 720p es posible seleccionar un mayor nivel de detalle.

Cabe comentar que, en pruebas realizadas con el mismo juego en un modelo dotado con microprocesador i7-4700MQ y gráfica nVidia Geforce GTX 765M, el juego se mostraba fluido en resolución Full-HD aun con el máximo de detalles.

Espero perdonéis que todos los juegos analizados perteneciesen a la saga Assasin's Creed, pero desgraciadamente fueron los únicos juegos actuales a los que pude echar mano (mi cuñado es fanático de esta saga), y creo que probar títulos anteriores a 2012 no hubiera sido interesante en un portátil que, como este, está diseñado para jugar.

Con acabado mate y un alto nivel de brillo, es posible usar la pantalla de este modelo en exteriores, si bien el mal tiempo de estos últimos días no me ha permitido probar el portátil bajo luz solar directa (solo nublado).



La resolución Full-HD (1920x1080), la elevada fidelidad de color (al inexperto ojo del que escribe), y el buen nivel de contraste (los negros son realmente negros) hacen que jugar o ver películas con este portátil sea una autentica gozada, contando con unos amplísimos ángulos de visión horizontales (casi 180 grados), siendo algo más reducidos los verticales, que de todas maneras son bastante mayores que lo habitual en portátiles de gama domestica.

Cuenta con unas excelentes capacidades de conexión a redes, siendo compatible tanto con Gigabit Ethernet (incorpora el sistema especifico para gamers Killer E2200, que permite asignar un mayor ancho de banda a algunas aplicaciones por encima de otras), como con Bluetooth o Wifi-N, que ofrece una excelente cobertura (donde la tarjeta wifi de mi Acer apenas alcanza un 40% de señal, la Realtek del MSI supera el 80%).



Desde el punto de vista de la conectividad, el GX70 es sumamente completo, disponiendo de 5 puertos USB (3 de los cuales son USB 3.0), tres salidas de video (VGA, HDMI y miniDisplayPort), lector de tarjetas SD/MMC, y 4 conectores de audio (micrófono, entrada de línea, salida de línea y auriculares, que hace las veces también de puerto digital S/PDIF), contando además con una webcam HD (720p).



Diseñado por la marca SteelSeries, su teclado en isla con bloque numérico separado cuenta con la peculiaridad de poder configurar el color de la zona derecha, central e izquierda de manera independiente, siendo posible seleccionar un color diferente para cada uno de los 3 bloques, que es como viene configurado originalmente.

Fuera de su aspecto multi-color, el teclado presenta un tacto agradable y un adecuado recorrido al pulsar las teclas, haciendo confortable escribir en el, si bien la disposición no me ha parecido demasiado acertada pues la tecla Intro es más pequeña de lo que estoy acostumbrada (ocupa solo una hilera y no dos como en un teclado estándar), la tecla "< >" se encuentra al lado de la barra espaciadora, y solo existe un botón Windows.

Sobre el teclado existe una botonera que, a ambos lados del botón de encendido (que encuentra en el centro de la misma) presenta 6 botones capacitivos (para accionarlo es suficiente con tocarlos), cuyas funciones son iniciar el reproductor multimedia predeterminado (por defecto PowerDVD 10), activar el modo Cooler Boost (que aumenta considerablemente la velocidad del ventilador del portátil), cambia el modo de retroiluminación (encendido, apagado, y un modo de juego en el que solo se ilumina el lado izquierdo), modo avión, apagar la pantalla, y un sexto botón que podemos configurar a nuestro gusto con la aplicación que deseemos.


De buen tamaño, su touchpad, con dos teclas independientes, se encuentra ligeramente más bajo que el reposamuñecas, y presenta una superficie ligeramente rugosa que no dificulta en absoluto el deslizamiento del dedo, ofreciendo una buena respuesta y compatibilidad con los gestos multi-táctiles más comunes. Es destacable que, al conectar un ratón externo, el touchpad se desconecta automáticamente, evitando de esta manera pulsaciones no deseadas.

Aprovechando la ocasión, me compre un termómetro por infrarrojos en el LIDL, el cual mide la temperatura en una superficie dada sin necesidad de que exista contacto, pero las mediciones no me parecieron muy fiables (por lo bajas), ya que tras más de una hora de juego, el mencionado termómetro marcaba menos de 20 grados en la base, razón por la cual no voy a publicar estas medidas en la reseña.

Si os puedo decir que, aun tras largas sesiones de juego, tanto sobre el teclado como en la base, las diferentes superficies del portátil permanecieron frescas en todo momento, no apreciando un calentamiento excesivo en ningún momento.


En cuanto al ruido generado por el único ventilador del portátil, es algo elevado con uso ligero, pues el ventilador no se para en ningún momento, mientras que bajo carga el nivel de ruido no es mucho mayor, siendo el portátil para juegos más silencioso (durante el juego) que he tenido oportunidad de probar.

Su sistema de altavoces estéreo con subwoofer, con la asistencia de la aplicación Sound Blaster Cinema (incluida), proporcionan una gran calidad de sonido y un alto nivel de volumen, no siendo necesario recurrir a auriculares o altavoces externos en ningún momento.

A pesar de contar con una batería de alta capacidad (87Wh y 7800mAh), la autonomía del GX70 mientras se está ejecutando un juego apenas alcanza las 2 horas (wifi conectada), mientras que con un uso más liviano (navegación con wifi) esta cifra ronda las 3 horas y media.

Se entrega con el sistema operativo Windows 8 (64 bits) instalado y con su correspondiente licencia (bajo la batería), contando además con una colección de software que alterna aplicaciones útiles como MSI Keyboard LED Manager (para controlar la retroiluminación) o Sound Blaster Cinema, con otras de dudosa utilidad como la tienda de aplicaciones BlueStacks o una versión de prueba de Winzip, que además permanecen residentes en todo momento.

He leído varios comentarios de usuarios de este portátil que, habiendo instalado Windows 7, han notado una notable mejoría en el comportamiento con juegos, si bien no puedo confirmar esta posibilidad.